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lunes, 7 de octubre de 2013

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Editorial, edición impresa 245.


Me gusta… Ver a San Lorenzo segundo en el campeonato, a una unidad de Newell's y soñar que hoy le ganamos a Tigre, que la Lepra cede algún punto, y que la fecha termine con el Cuervo en la cima de la tabla de posiciones del Inicial.

Me gusta… Que el Ciclón sea finalista de la Copa Argentina, que, como nos dijo el gran Bernie Romeo (págs. 10 y 11), “es un campeonato joven pero lindo”, y, además de otorgarte una medalla, tiene el condimento de depositarte en la Histérica (Bejuk dixit) Libertadores de América. Ojalá la ganemos y más de diez mil cuervos terminemos “de fiesta y en pedo” -como dice la letra de la Gloriosaen
Catamarca.

Me gusta… Mirar la tabla de los Promedios. Sí, a diferencia de la mayoría de los
cuervos que la detestan y no la quieren ver nunca más, a mí me gusta disfrutarla
así como está ahora: con San Lorenzo cada vez más arriba, engordando su
coeficiente y despejando cualquier tipo de fantasmitas. Ni hablar de la alegría
que te produce analizar cómo quedaríamos ubicados la temporada próxima si el
campeonato finalizara hoy. Te recomiendo un ejercicio: entrá a Promiedos.com.ar
y curtite un poco. Vale la pena, después de los dos años que padecimos.

Me gusta… Que el primer equipo del Ciclón esté integrado por tantos pibes
surgidos de la cantera del club. Que los hinchas nos rompamos las manos para
aplaudir a Correa, que nos sigamos sorprendiendo con la velocidad de Verón, que
nos cautive la explosión de Villalba cada vez que ingresa o que nos ilusionemos
con festejar un gol cada vez que Navarro está por patear un tiro libre. Un párrafo
aparte para Walter Kannemann: ¡Gracias por los huevos que ponés, Gringo!

Me gusta... Seguir disfrutando al Pipi, que juega con el alma, y que cada vez que
se retira del campo de juego se vaya ovacionado por el estadio entero, y ver
correr a Buffa, incansable jugando de defensor, volante o wing derecho, ahora sin
la melena rubia pero con la fuerza y el corazón de siempre.

Me gusta… Que se hayan colocado las primeras columnas de hierro en Tierra
Santa. Ocurrió el martes pasado en la Plaza Lorenzo Massa, donde se está
montando el Polideportivo Roberto Pando, con el siempre destacable laburo de
los cuervos de la Subcomisión del Hincha. Y nos hablaban de utopías…

Me gusta… Que los sanlorencistas sigan sumando metros cuadrados al
Fideicomiso por la vuelta a Boedo. Que hasta hinchas de otros cuadros y
periodistas que no son cuervos se sumen a la causa. Que el máximo sueño de
todos nosotros, como el mío, el tuyo, el de tu viejo, el del mío, el de tu abuelo, tío,
primo, amigo o vecino, esté tan cerquita de convertirse en realidad. Perdón, esto
no me gusta: ¡me encanta!

Y, para cerrar, me gustaría… Que en estos días tengamos la confirmación de que
Matías Lammens se postulará nuevamente como candidato a presidente, para
consolidar, junto a su grupo de trabajo, este proyecto que levantó al club de uno
de los momentos más críticos que le tocó atravesar en los últimos treinta años.
Y, claro, me gustaría que a fin de año levantemos una copa por un San Lorenzo
campeón.




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