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lunes, 31 de mayo de 2010

Diego, querido, Boedo está contigo…




"Para mí, la de los cuervos, es la hinchada más pimpante de la Argentina: sacan los cantitos más ingeniosos, te divierten... Los quiero, los quiero mucho: me hubiera gustado jugar con esa camiseta".



… Y nosotros también te queremos Diego.
Porque siempre respetaste nuestra camiseta y nosotros te respetamos a vos.

Porque siempre que nos cruzamos en un estadio, coreamos tu nombre y vos, nos devolviste un saludo afectuoso.

Porque siempre hubo un amor mutuo entre vos y los hinchas del Ciclón y jamás pudimos ocultarlo. “Diego, querido, Boedo está contigo”, te cantamos miles de veces. “Si no era de Boca hubiera sido cuervo”, dijiste más de una vez.

Porque siempre entendiste lo gloriosa que es nuestra hinchada y nosotros siempre entendimos el genio que fuistes.

Es verdad Diego, a los cuervos nos hubiera encantado verte jugar con nuestra camiseta, que como se puede apreciar en las fotos que acompañan estas líneas te queda tan linda, pero no hizo falta que eso suceda para que seas un ídolo del pueblo azulgrana.

Por eso, ahora que estás al frente de nuestra Selección Nacional de fútbol, los cuervos volvemos a brindarte todo nuestro apoyo y soñamos, junto a vos, con que puedas volver a la Argentina con la Copa del Mundo en tus brazos, como lo hiciste en 1986.

Genio, te lo cantamos una vez más: “Diego, querido, Boedo está contigo”…










viernes, 28 de mayo de 2010


Finalizada la conferencia de prensa por su presentación oficial como nuevo DT azulgrana, La Revista del Ciclón cruzó unas palabras con el रिओजनो.
Fue así:
LRDC: -Ramón, Diego dijo que si trae la copa va desnudo a festejar al obelisco... ¿Vos qué harías? Ramón: -Y... yo voy como fotógrafo, para sacarle las fotos...
LRDC: -¿Y si vos ganás la Copa con San Lorenzo?
Ramón: -Eeeeh (risas), hago lo que quieran ...
Escuchá este audio en el blog de la revista: http://larevistadelciclon.blogspot.com/

Durante la conferencia de prensa Ramón Díaz no pudo ocultar que ganar la Copa Libertadores con San Lorenzo es una cuenta pendiente que le quedó de su ciclo anterior.... Ojalá se le de!

Ramón Díaz, nuevo DT azulgrana

Te mostramos algunas de las imágenes que dejó la presentación de Ramón como nuevo DT azulgrana.










Ramón ya está en Boedo


Y al fin llegó el día tan esperado por el pueblo azulgrana। Esta tarde, el vestuario local del Nuevo Gasómetro se convirtió en una improvisada sala de conferencia de prensa, y Ramón Díaz fue oficializado como el nuevo DT del Ciclón

Las expectativas generadas por el segundo desembarco del riojano a tierra azulgrana no sólo se apreciaron por los numerosos periodistas que se acercaron al Bajo Flores, sino también por la gran cantidad de cuervos que quisieron ser testigos del nuevo arribo de Ramón a Boedo। Tal es así, que ni bien entrando a la Platea Norte se dejaba ver una bandera azulgrana con la palabra “Ramonero” y otra con el rostro del riojano hecho caricatura।
Ni bien apareció Ramón, con su pícara sonrisa, estalló el “que de la mano de Ramón Díaz, todos la vuelta vamos a dar”, y la sala de prensa se convirtió por un instante en una especie de popular cuerva.
“Quiero agradecerle al presidente y a la gente de San Lorenzo por este reconocimiento। Es un orgullo saber que cuando nos fuimos dejamos un gran recuerdo. Eso para mí es importante no sólo como profesional sino también como persona. Solamente tengo palabras de agradecimiento para los hinchas por el cariño que me dieron”, fueron las primeras palabras del riojano en el comienzo de su segunda estadía en San Lorenzo.

Como había ocurrido en su primera etapa en el club, las desubicadas preguntas alusivas a su relación con River y con Daniel Passarella no se hicieron esperar, pero esta vez fue el propio Ramón Díaz el que se encargó de desentenderse de su pasado Millonario y solo se dedicó a hablar de San Lorenzo y de agradecerle una y otra vez a los hinchas por el “cariño” que siempre le demostraron.

Cuando ya finalizaba la conferencia Ramón dejó en claro que vuelve al Ciclón “para pelear bien arriba” y destacó que “la ayuda de la gente es fundamental para que los equipos que vienen a jugar a nuestra cancha sientan la presión de que están jugando contra un equipo competitivo y uno de los más grandes del país”.

Llegó Ramón a Boedo y ya empezó a hacer mucho ruido…


jueves, 20 de mayo de 2010

Portada 208


Editorial


Por Gastón García
Dentro de un rato, el Ciclón culminará uno de los peores campeonatos en toda su historia। Si no fuera por la pobre campaña que hicieron los descendidos Chacarita y Atlético Tucumán, estaríamos hablando de un equipo que, tranquilamente, hubiera salido último। Una vergüenza।

Todos los que amamos el fútbol sentimos un cosquilleo especial cada vez que se aproxima un Mundial. Uno ya va pispeando los horarios y los días de los partidos para empezar a programar qué encuentros se podrán ver en casa, cuáles en algún “recreo” laboral y qué choques son merecedores de un faltazo al colegio o de una llegada tarde al laburo. Pero los hinchas más ansiosos por la llegada del 11 de junio, día en que arranca la Copa del Mundo en Sudáfrica son, sin dudas, los de San Lorenzo. Es que este Torneo Clausura se nos terminó demasiado rápido. La ilusión por pelear el título se deshizo bastante antes de la mitad del certamen. Los cuervos fuimos (y somos) testigos de uno de los campeonatos más indignos en la historia de San Lorenzo. Las once derrotas, que hoy pueden ser doce, ya son una marca tristemente indeleble en la vida del club. Solo en el Clausura 1996 se había registrado esa cifra. Claro que en aquella ocasión el Ciclón estaba jugando simultáneamente la Copa Libertadores (llegó hasta cuartos de final) y en esta oportunidad no hubo ningún otro objetivo en el que ocuparse, lo que demuestra que desde la instauración de los torneos de una sola rueda, esta es la peor actuación de San Lorenzo. Quizás no desde lo numérico, ya que en Clausura 1992 (también estaba jugando la Copa) y en el citado campeonato de 1996 finalizó decimonoveno (ver nota de la las páginas 8 y 9), pero sí desde lo futbolístico, rubro en el que fue infinitamente inferior a la mayoría de sus rivales.

Una triste despedida
Ponerse a analizar el rendimiento futbolístico de San Lorenzo en las últimas dos fechas, las dos que se disputaron desde la última aparición de La Revista del Ciclón, es innecesario por lo reiterativo. Palabras más, palabras menos, se escribiría lo mismo que en la edición anterior: que Sebastián Méndez se sobrepasa de conservador y que los rivales, con poquito, hacen méritos para ganar. Y lo hacen. Ante Argentinos, por caso, luego de un respetable primer tiempo, el equipo se abroqueló demasiado atrás y le permitió al Bicho arrimarse al arco de Migliore (hubo mérito del conjunto de Borghi también, por supuesto). Eso hizo que los de La Paternal se llevaran un triunfo tan agónico como justo. Algo parecido ocurrió ante Lanús, el lunes pasado. Una primera etapa medianamente digna, un gol a favor y luego lo de siempre: todos atrás y que Dios nos ayude. Pero como el Señor tiene problemas más urgentes por resolver, surge el mismo final: el rival termina festejando.
No da para criticar con dureza al Gallego. De hecho, este equipo ya era un desastre antes de que él asumiera. Pero está claro que su breve gestión, que terminará en un rato, no deja muchas cosas positivas para resaltar. Apenas algunos pasajes del partido ante Huracán y poco más.
De Simeone ya se ha escrito y hablado mucho. El es uno de los principales responsables de este triste presente. Pero como el Cholo ya no está, tampoco da para volver a agarrárselas con él. Lo mismo ocurre con los jugadores. La mayoría de ellos también son grandes protagonistas en esta película de terror que fue San Lorenzo en el Clausura 2010. Ya los hemos sacudido bastante. Y como el final está, por suerte, a sólo noventa minutos, desde este espacio vamos tener un poco de piedad.
Lo que viene debería ser mejor. No tiene que ser algo extraordinario, ni mucho menos, para serlo. La llegada de Ramón Díaz, y de algunos refuerzos, seguramente revitalizará el ánimo. Ojalá que no tengamos que volver a padecer otro torneo como este que se va. Porque la situación ya se tornaría de una gravedad extrema. Y ya no habrá Mundial para consolarnos.

La Columna del Hermano Cuervo

Por Eduardo Bejuk
El campeonato más largo del mundo

Alguna vez, el Hermano Cuervo Osvaldo Soriano (de pie) escribió un relato titulado “El penal más largo del mundo”. Si no lo leíste, googlealo. Esta crónica, carente del talento del célebre Gordo, no tiene nada que ver. Pero se titula “El campeonato más largo del mundo”.
Dicen que por fin se termina esta tarde. El campeonato más largo e insoportable que se recuerde en mucho tiempo. No aguanto más. Tengo pesadillas. Perdimos con Juniors, en su etapa más cabaretera... Con River, en su etapa más vedette (con ganas de promoción)... ¡Y contra nueve equipos más! Escalofríos. Contracturas. Insomnio. ¿Hoy se termina?
San Lorenzo pasó por malos, malísimos momentos, pero esto es taaan lamentable... De lo peor. Nos vendieron pomposamente que íbamos a posicionarnos entre Boca y River, y sólo tuvieron razón por lo mal que andan ellos. Un plantel derrotado, sin alma, sin rumbo, del cual se esperaba muchísimo más, despide el Clausura con triste indiferencia. La crisis es futbolística, claro, pero también de identidad. Los jugadores no nos representan ni un poquito. Son los tiempos de los impersonales futbolistas que se ponen la camiseta, pasan con pena y sin gloria y, uno sabe, serán olvidados al poco tiempo. Los técnicos la complican en vez de hacerla fácil. Y los dirigentes... mamita. Le rezan a Ramón (y yo rezo porque no hipotequen el club ni hagan más desastres)
Cuento los minutos. Ya se termina. Empieza el Mundial. La novela de la tarde. Utilísima. Pero basta del Clausura, de los partidos sin goles, de las derrotas, lesiones, expulsiones, papelones... No doy más.
Se terminó
.

Gracias Chaca; gracias Atlético

Por Jorge Fuentes
Dentro de un rato, el Ciclón culminará uno de los peores campeonatos en toda su historia। Si no fuera por la pobre campaña que hicieron los descendidos Chacarita y Atlético Tucumán, estaríamos hablando de un equipo que, tranquilamente, hubiera salido último। Una vergüenza।

Todos los que amamos el fútbol sentimos un cosquilleo especial cada vez que se aproxima un Mundial. Uno ya va pispeando los horarios y los días de los partidos para empezar a programar qué encuentros se podrán ver en casa, cuáles en algún “recreo” laboral y qué choques son merecedores de un faltazo al colegio o de una llegada tarde al laburo. Pero los hinchas más ansiosos por la llegada del 11 de junio, día en que arranca la Copa del Mundo en Sudáfrica son, sin dudas, los de San Lorenzo. Es que este Torneo Clausura se nos terminó demasiado rápido. La ilusión por pelear el título se deshizo bastante antes de la mitad del certamen. Los cuervos fuimos (y somos) testigos de uno de los campeonatos más indignos en la historia de San Lorenzo. Las once derrotas, que hoy pueden ser doce, ya son una marca tristemente indeleble en la vida del club. Solo en el Clausura 1996 se había registrado esa cifra. Claro que en aquella ocasión el Ciclón estaba jugando simultáneamente la Copa Libertadores (llegó hasta cuartos de final) y en esta oportunidad no hubo ningún otro objetivo en el que ocuparse, lo que demuestra que desde la instauración de los torneos de una sola rueda, esta es la peor actuación de San Lorenzo. Quizás no desde lo numérico, ya que en Clausura 1992 (también estaba jugando la Copa) y en el citado campeonato de 1996 finalizó decimonoveno (ver nota de la las páginas 8 y 9), pero sí desde lo futbolístico, rubro en el que fue infinitamente inferior a la mayoría de sus rivales.

Una triste despedida
Ponerse a analizar el rendimiento futbolístico de San Lorenzo en las últimas dos fechas, las dos que se disputaron desde la última aparición de La Revista del Ciclón, es innecesario por lo reiterativo. Palabras más, palabras menos, se escribiría lo mismo que en la edición anterior: que Sebastián Méndez se sobrepasa de conservador y que los rivales, con poquito, hacen méritos para ganar. Y lo hacen. Ante Argentinos, por caso, luego de un respetable primer tiempo, el equipo se abroqueló demasiado atrás y le permitió al Bicho arrimarse al arco de Migliore (hubo mérito del conjunto de Borghi también, por supuesto). Eso hizo que los de La Paternal se llevaran un triunfo tan agónico como justo. Algo parecido ocurrió ante Lanús, el lunes pasado. Una primera etapa medianamente digna, un gol a favor y luego lo de siempre: todos atrás y que Dios nos ayude. Pero como el Señor tiene problemas más urgentes por resolver, surge el mismo final: el rival termina festejando.
No da para criticar con dureza al Gallego. De hecho, este equipo ya era un desastre antes de que él asumiera. Pero está claro que su breve gestión, que terminará en un rato, no deja muchas cosas positivas para resaltar. Apenas algunos pasajes del partido ante Huracán y poco más.
De Simeone ya se ha escrito y hablado mucho. El es uno de los principales responsables de este triste presente. Pero como el Cholo ya no está, tampoco da para volver a agarrárselas con él. Lo mismo ocurre con los jugadores. La mayoría de ellos también son grandes protagonistas en esta película de terror que fue San Lorenzo en el Clausura 2010. Ya los hemos sacudido bastante. Y como el final está, por suerte, a sólo noventa minutos, desde este espacio vamos tener un poco de piedad.
Lo que viene debería ser mejor. No tiene que ser algo extraordinario, ni mucho menos, para serlo. La llegada de Ramón Díaz, y de algunos refuerzos, seguramente revitalizará el ánimo. Ojalá que no tengamos que volver a padecer otro torneo como este que se va. Porque la situación ya se tornaría de una gravedad extrema. Y ya no habrá Mundial para consolarnos.

Por fin termina la pesadilla


Por Gastón García

La horrorosa campaña de San Lorenzo en este Clausura 2010 quedará en el recuerdo de todos los hinchas del Ciclón… Pero como una de las peores de su historia। Una triste realidad que nos regalaron los jugadores azulgranas।

Las estadísticas no siempre son un fiel espejo de la realidad। Un claro ejemplo de esto son los mentirosos números del Indec, que los K se esmeran en esmerilar para que al menos en los diarios argentinos la inflación no sea lo que realmente es. Pero esos números, truchos, mueren en el intento por ejemplo cuando vamos al supermercado, llenamos el changuito y luego de pasar por la caja se nos cae un lagrimón por haber dejado ahí, gran parte de nuestro sueldo.


Pero también es verdad que muchas veces las estadísticas sí son el fiel reflejo de la realidad. Y el fútbol -o más bien, el no fútbol- de San Lorenzo nos permite demostrar que dos más dos es cuatro y que es algo que no tenemos posibilidad de modificar, ni siquiera haciendo trampas.
Veamos… El rendimiento que tuvieron los jugadores de San Lorenzo en este campeonato fue de malo a muy malo. Por ende, se despidieron de la lucha por el título en la cuarta fecha. Por ende, la campaña fue horrible. Por ende, hasta hoy perdieron once de 18 partidos jugados. Por ende el Ciclón solo figura arriba de los descendidos Altlético Tucumán y Chacarita. Por ende, no se clasificaron a la Copa Sudamericana (primera vez que San Lorenzo no la jugará). Por ende, quedaron muy lejos de la clasificación a la próxima Libertadores. Por ende, se comieron al Cholo Simeone e hicieron que Méndez desaprobara su trabajo práctico titulado “San Lorenzo”. Y por ende, los dirigentes tuvieron que recurrir a Ramón Díaz para ver si los puede salvar de este infierno como lo hicieron a finales de 2006, cuando Oscar Ruggeri generó uno de los incendios más grandes que se haya sufrido por Boedo en los últimos años. Como siempre hay una excepción a la regla, el único por ende que no le pudimos colocar a estos jugadores y su horrible campaña, es hacia la gloriosa hinchada azulgrana, que a pesar de sufrir esta pesadilla llamada Clausura 2010, coparon todos los estadios y alentaron al equipo como si el Ciclón peleara el campeonato junto a Estudiantes y Argentinos.
Como decíamos antes, dos más dos es cuatro y esa es una estadística que jamás podrá fallar. Como tampoco puede fallar que si un equipo juega tan mal como San Lorenzo, va a hacer una campaña paupérrima, se ubicará en los últimos puestos de la tabla de posiciones, y va a quedar en el recuerdo como uno de los más penosos de la historia del club.
Para ser más específicos, desde que se instalaron los torneos Clausura/Apertura las peores campañas desarrolladas por un conjunto azulgrana fueron las producidas en los Clausura 92 y 96. En esos campeonatos, Boedo obtuvo apenas el 32 y 28 por ciento de efectividad de puntos pero con el atenuante de que en ambos disputaba en forma paralela la Copa Libertadores. En el torneo actual, el equipo que ahora dirige Méndez, pero que diseñó Simeone, ya no podrá escaparse de quedar como uno de los tres peores desde que se disputan los Apertura/Clausura. Si esta tarde derrota a Newell’s quedará como el tercero de los más malos; si empata como el segundo y si vuelve a perder igualara la peor campaña que fue la de 1996 (pero esta vez sin disputar un campeonato continental como aquella vez).
Esto es lo que lograron los actuales jugadores del Ciclón, que ni siquiera podrán esgrimir como excusa que afrontaron dos competiciones, para trampear un poquito las estadísticas.
Por suerte, a esta pesadilla solo le resta un capítulo que se jugará dentro de un ratito en el Nuevo Gasómetro. El resultado ya no podrá modificar la historia. Como mucho determinará que este fue el peor San Lorenzo de los últimos años. Y disculpe el pesimismo, pero lo más probable es que una vez más los cuervos nos volvamos tristes a nuestra casa. ¡Gracias jugadores!

Año posición puntos efectividad
1990 11 18 45%
1991 2 27 71%
1991 3 22 38%
1992 19 12 32%
1992 3 23 61%
1993 4 22 58%
1993 8 21 55%
1994 4 23 61%
1994 2 26 68%
1995 1 30 79%
1995 5 32 56%
1996 19 16 28%
1996 7 27 47%
1997 6 30 53%
1997 4 32 56%
1998 5 30 53%
1998 6 25 44%
1999 3 36 63%
1999 4 36 63%
2000 4 36 63%
2000 5 34 60%
2001 1 47 82%
2001 5 31 54%
2002 11 26 46%
2002 9 27 47%
2003 7 29 51%
2003 2 36 63%
2004 9 26 46%
2004 5 30 53%
2005 16 22 39%
2005 9 28 49%
2006 8 28 49%
2006 9 28 49%
2007 1 45 79%
2007 8 29 51%
2008 4 35 61%
2008 3 39 68%
2009 11 24 42%
2009 7 32 56%
2010 ? 17 30%
2010 ? 18 32%
2010 ? 20 35%

De Boedo al Mundial

Por Gastón García

San Lorenzo le aportó 17 jugadores a la Selección Nacional en Mundiales। La Volpe, Olguín y Ruggeri fueron los únicos que lograron levantar la copa. Si bien en Sudáfrica no habrá ningún futbolista del Ciclón representando a la Argentina, en este informe te mostramos cuáles fueron पोर Gastóntodos los jugadores cuervos que llegaron a una cita muन Garcíadialistअ

Señores, el Mundial está al caer. Faltan apenas 29 días para que ese mes sublime que se hace esperar durante cuatro años ponga en vilo a un país entero. A partir del 11 de junio, cuando Sudáfrica y México den el puntapié inicial, o mejor dicho desde que Diego y sus muchachos arranquen su aventura mundialista, los argentinos futboleros (y los no tanto también) estaremos mancomunados como nunca bajo la camiseta celeste y blanca de nuestra Selección nacional.
En la lista inicial de 30 futbolistas que anunció Maradona el martes pasado ninguno pertenece al plantel actual del Ciclón. De esto se desprende que de los 23 elegidos por Diego que viajarán a Sudáfrica, ninguno mutará al menos por unos días la camiseta azulgrana por la albiceleste. Es más, de esos treinta convocables que se anunciaron el martes pasado, Ezequiel Lavezzi (actualmente en el Nápoli) y Fabricio Coloccini (Newcastle) serían los únicos futbolistas que podría inflar el pecho de los cuervos en el Mundial por su pasado azulgrana. Aunque según los rumores periodísticos, Colocha no iría y además, Maradona optaría por el interminable Martín Palermo para que se sume a la lista de delanteros que seguramente integrarán Messi, Higuaín, Tévez, Agüero y Milito. De confirmarse esos rumores, lamentablemente el Pocho tendrá que ver lo que suceda en Sudáfrica desde el living de su casa, como lo haremos los más de cuatro millones de cuervos que habitamos este planeta, salvo algunos miembros de la gloriosa Buteler y algún que otro del Mástil… Ah, por suerte en Sudáfrica seguramente también nos representarán, y de maravilla, los Corbs (cuervos en Catalán) de Barcelona que siempre se las ingenian para dejar bien ubicado un trapo del Ciclón y que podrá ser apreciado por televisión en todo el mundo.
Pero volviendo a los jugadores de San Lorenzo en el Mundial, o mejor dicho a la ausencia de ellos en Sudáfrica, esta situación no debe causar ningún tipo de sorpresa entre los sanlorencistas. Después de la horrible campaña que hicieron nuestros players, Diego no le pudo tirar ni un guiño a ningún futbolista azulgrana, ni siquiera para integrar la selección descartable que hace unos días le ganó 4-0 a Haití en Cutral Có, integrada por figuras de alto vuelo como Paolo Goltz y Patricio Toranzo. Mamadera… Dios le da pan al que no tiene dientes y alegrías (ínfimas) a los que no tienen gente.
En fin, dejando la pavada de lado, le damos paso a este informe, bien al estilo de esta revista, que nos muestra cuáles fueron los jugadores que San Lorenzo le prestó a alguna Selección Nacional, para formar parte de los planteles mundialistas. Suerte Diego, y no te olvides de Paolo por favor…je.

Monti, Luis Uruguay 1930 Delantero Subcampeón (4 jugados 2 goles)
Boggio, Norberto Suecia 1958 Delantero Primera Fase (1 jugado)
Sanfilippo, José Suecia 1958 Delantero Primera Fase (no jugo)
Sanfilippo, José Chile 1962 Delantero Primera Fase (2 jugados – 1 gol)
Facundo, Héctor Chile 1962 Delantero Primera Fase (2 jugados – 1 gol)
Mariotti, Alberto Chile 1962 Defensor (no jugo)
Páez, Raúl Chile 1962 Defensor (no jugo)
Rossi, Oscar Chile 1962 Mediocampista (1 jugado)
Albrecht, José Rafael Inglaterra 1966 Defensor Cuartos de Final (3 jugados)
Calics, Oscar Inglaterra 1966 Defensor (1 jugado)
Chaldú, Mario Inglaterra 1966 Delantero (no jugo)
Varacka, José Inglaterra 1966 Defensor (no jugo)
Chazarreta, Enrique Alemania 1974 Mediocampista Primera Fase (1 jugado)
Glaría, Rubén Alemania 1974 Defensor ( 3 jugados)
Telch, Roberto Alemania 1974 Mediocampista (5 jugados)
La Volpe, Ricardo Argentina 1978 Arquero Campeón (no jugó)
Olguín, Jorge Argentina 1978 Defensor (7 jugados todos)
Ruggeri, Oscar EE. UU. 1994 Defensor Octavos de Final (4 jugados)


Luis Monti jugó también el mundial de Italia 1934, pero para la Selección local.

lunes, 3 de mayo de 2010

Portada 207


Editorial (Pág. 3)


Por Jorge Fuentes
¿Debe venir Ramón?

Ramón Díaz es el candidato más firme a ocupar el cargo de director técnico en el próximo torneo. Es un secreto a voces que los dirigentes ya han mantenido contactos con él y que el riojano vería con muy buenos ojos tener una segunda etapa como entrenador del Ciclón. Hasta aquí, esto es una información que podría concretarse en poco tiempo más. Un mes, aproximadamente.
Ahora ingresemos al terreno de las suposiciones e imaginemos que sí, que finalmente Ramón Díaz vuelve a ser el técnico de San Lorenzo. ¿Cuál sería la reacción de los cuervos? Se descuenta que no habrá unanimidad en las opiniones. Entonces, pongamos sobre la mesa los pro y los contra del hipotético arribo del Pelado
A favor. El tipo, evidentemente, tiene ángel. Y uno no se refiere a su segundo nombre, sino a un carisma especial que hace que mucha gente caiga rendida a sus pies. Con sólo sonreír, le alcanza para generar un buen clima con los jugadores, con los dirigentes, con los hinchas y con los periodistas. Y gracias a esa forma de ser, logra sacarles presión a los futbolistas, quienes hacen su trabajo sin ataduras, mientras él se hace cargo de los flashes. Además de acaparar la atención de la prensa (de muchísima prensa), también consigue que vaya más gente a la cancha. En 2007, por caso, cuando desembarcó en San Lorenzo, el Nuevo Gasómetro estuvo lleno desde la primera fecha. Y, finalmente, por más que en muchas ocasiones se lo ha ridiculizado, el hombre sabe. Lo demostró varias veces en River y también en San Lorenzo, donde ganó el último título que festejamos los cuervos (el Clausura 2007, por si hay algún lector desmemoriado), y realizó una muy buena Copa Libertadores en 2008.
En contra. Si Ramón hoy tiene chances de ser el DT de San Lorenzo se debe, en primera medida, a que en River le cerraron la puerta en las narices. El Ciclón nunca estuvo entre sus prioridades. Y ahora, con Ángel Cappa en el banco millonario, el Pelado, despechado, intentará utilizar a San Lorenzo para vengarse de Passarella y compañía. Uno preferiría que el técnico que llegue al club lo haga porque se muere de ganas por triunfar en el Ciclón, no para dedicárselo a terceros. Y hay más. Su aterrizaje, también, aparenta ser una jugada del oficialismo para, en caso de realizar Díaz una buena campaña, obtener réditos en las elecciones de fin de año. Desde un punto de vista político, esto puede ser observado como algo lógico. Pero no sería lo mejor para la institución que Ramón influya, directa o indirectamente, en la decisión que deberán tomar los socios en diciembre. En todo caso, podría hacerlo en River, el club con el que está ligado sentimentalmente. Su pasado en Boedo, además, tiene algunos puntos grises, tirando a negros. La incorporación de sus hijos a la Primera de San Lorenzo fue (y lo sigue siendo) algo indefendible. Y en aquella pelea por los premios, horas antes de que se jugara el decisivo partido ante la Liga de Quito, por la Copa, los culpables no sólo fueron Agustín Orión, Adrián González y compañía. Él también tuvo que ver. Y mucho.

Ramón Díaz puede llegar a ser el próximo técnico de San Lorenzo. ¿Está bien? ¿Está mal? El debate está abierto. ¿Qué pensamos en La Revista del Ciclón? Luego de releer lo escrito arriba, quien firma esta nota, tiene más dudas que certezas. Pero el espacio utilizado en “En contra” es mayor al usado en “A favor”. No debe ser casualidad.

La columna del Hermano Cuervo

Por Eduardo Bejuk
En alas de su gente


Si fuimos capaces de construir una leyenda desde un grupo de pibes de barrio y nunca traicionamos su esencia...
Si fuimos capaces de construir una cancha que después se convirtió en mito, desde su fantasmagórica presencia eterna...
Si llevamos más gente en la B que el River-Boca de la A...
Si somos la hinchada que admira Maradona, imitan hasta en Tokyo (http://www.youtube.com/watch?v=AxZOCicIYGU) y tiene el copyright del 85% de las canciones del fútbol argentino...
Si levantamos un nuevo estadio, ganamos títulos en todas las décadas y representamos el paradigma del optimismo invencible...
Si nunca pudieron parar a esta gloriosa hinchada... ¿Cómo no vamos a volver a ser?
Sacar Carasucias de las Inferiores, recuperar la mística para trasladarla al equipo, armarnos de nuevo para pelear un campeonato. Y soñar con la histérica Copa. Y obligar a la gente a reventar estadios. Y rompernos la garganta de tanto el-Ci-clón-el-Ci-clón.
¡Claro que volveremos a ser!
Pero así como estamos, estamos mal. Porque ni siquiera le damos un susto a nuestro primogénito del Riachuelo, aún en su opaca versión cabaretera. Y eso duele. Este amargo y olvidable campeonato, por suerte, se está terminando. Un suplicio. Pero basta... Que los que toman las decisiones, estén a la altura de lo que se merece San Lorenzo. Porque así, estamos mal. Muy mal.
Cuervo al fin, el epílogo es optimista: de alguna forma, todos sabemos que el Ciclón resurgirá. Bah, de la única forma posible: en alas de su gente, negras alas que siempre brillan. En el sol o en la tormenta.

Torneo Clausura (Pág. 6 y 7)

Por Jorge Fuentes
Un Gallego demasiado cauteloso

En estos cuatro partidos, Sebastián Méndez ya dio señales de qué clase de técnico quiere ser. Su idea es la de armar un equipo “de atrás para adelante”, con una línea de cuatro sólida y un medio combativo. El problema es que, salvo en el partido ante Huracán, no se animó a salir a lastimar al rival. Y en San Lorenzo, eso no puede pasar.

La tardía salida de Diego Simeone terminó descomprimiendo un clima que ya se tornaba irrespirable. Y la llegada de Sebastián Méndez trajo, de movida, un poco de tranquilidad, algo que en San Lorenzo hacía rato que no se disfrutaba. Pero la sorpresiva asunción del Gallego también generó inquietudes y dudas sobre cómo se desempeñaría el ex zaguero en su nueva función. Y en estos primeros cuatro partidos como DT, Méndez ya mostró un estilo claro y definido. Está claro que no sería justo realizar críticas duras sobre lo mostrado hasta el momento. Primero porque, de entrada, diagramó una formación medianamente lógica, algo que con el Cholo Simeone no ocurría. Y después, porque su carrera recién arranca y todavía tiene mucho camino por transitar y un montón de cosas por aprender. Pero lo que sí se puede hacer es un breve análisis de lo ofrecido por el Ciclón en estos cuatro encuentros con el Gallego como entrenador y remarcar algunos puntos que merecen ser discutidos.

Partido a partido
Ante Banfield, San Lorenzo fue superado totalmente. Hasta dio la sensación de que el Taladro levantó el pie del acelerador. No puede achacársele demasiado a Méndez por este partido. Era el primero y casi no había trabajado con el plantel. Así y todo, armó un 4-3-1-2, con Romagnoli como enganche, que si bien no rindió, al menos se asemejó a un equipo con una idea más o menos clara.
Luego, con Independiente, el planteo fue un poco más mezquino (4-4-2). Se encontró rápidamente con el gol de Nelson Benítez y luego se dedicó a cuidar la diferencia. Pudo haber ampliado la ventaja por intermedio de Emiliano Alfaro y Fabián Bordagaray, pero también se metió demasiado atrás y le permitió al Rojo jugar casi todo el segundo tiempo en el campo del Ciclón. El 1-0 no se modificó. En gran parte por la buena tarea de la defensa azulgrana. Pero también gracias a la impericia de los muchachos del Tolo Gallego.
Contra Huracán se vio lo mejor del ciclo Méndez. Con Alfaro y Bordagaray rotando por todo el frente de ataque, y Alejandro Gómez y Aureliano Torres llegando por los costados, el Ciclón dominó al Globito y se puso justicieramente en ventaja con una buena definición del Papu. Pero luego volvió a replegarse. Y como lo del equipo de Rivoira fue tan pobre, casi no sufrió. Solamente después de un descuido en una pelota parada, Migliore tuvo que revolcarse un poco. Igualmente, esa actitud de abroquelarse tan atrás empezó a preocupar a los cuervos. Finalmente, la expulsión del defensor qumero Filipetto simplificó las cosas. Aparecieron espacios, llegaron los goles, los oles y la fiesta. Aunque eso no debió hacer olvidar que San Lorenzo pudo haberse complicado un partido que era de sencilla resolución con un poco más de ambición.
En el choque de hace siete días, ante Boca, Méndez profundizó la idea de asegurar el cero en el arco propio y salió a defenderse desde el minuto cero. Pero el plan fracasó de inmediato. A los tres minutos, el Ciclón ya perdía 1 a 0. En toda la etapa inicial, San Lorenzo jamás pudo enhebrar una jugada ofensiva más o menos digna, pese a los esfuerzos de Bordagaray y Gómez, que quedaron más cerca de los cuervos que estaban en la tercera bandeja que de sus compañeros. Así, Boca controló el partido sin demasiados problemas. En el complemento, con el ingreso de Menseguez, el equipo jugó a otra cosa. No lo hizo muy bien, es cierto, pero por lo menos logró que el arquero García dejara de ser un espectador de lujo. Más allá de los errores gravitantes de Gabriel Favale (ya se hablará de él en las páginas siguientes), San Lorenzo fue a la Boca a rasguñar un puntito, como un equipo chico. Y recibió el castigo que se merecía: perdió. Dolió porque se trató de Boca. Y perder con Boca siempre es feo. Se insiste: la idea no es caerle con todo a Sebastián Méndez. Pero sí hay que señalarle que con estos planteos timoratos se pierde más de lo que se gana. Ojalá que el Gallego sepa entenderlo.

San Lorenzo - Boca (Pág. 8 y 9)

Por Gastón García
Un robo a la vista de miles de turistas
San Lorenzo perdió en la Bombonera pura y exclusivamente por culpa del planteo mezquino que planificó el técnico aprendiz Sebastián Méndez. A pesar de eso, una vez más un árbitro le metió la mano en el bolsillo a los cuervos. Esta vez fue Gabriel Favale, quien no le concedió dos alevosos penales al Ciclón, que además de los miles de turistas que estaban en la Bombonera, lo vieron hasta los habitantes del planeta Marte. Esta historia ya la conocemos. Pero quédense tranquilos, que aunque sigan robando para la corona, como nacieron hijos nuestros, hijos nuestros morirán…

Si existiera un Diccionario del Fútbol, al verbo llorar le correspondería una definición más o menos así: “excusa que es utilizada por los miembros de un club, ya sean jugadores, dirigentes o hinchas, para responsabilizar de la derrota de su equipo a factores externos al juego del fútbol propiamente dicho. Generalmente, los más acusados suelen ser los árbitros”. Y no sería para nada descabellada. Porque cuando esos jugadores, dirigentes o hinchas aducen que una derrota fue producto de desaciertos arbítrales que perjudicaron a su equipo, no están haciendo más que justificar o responsabilizar a un tercero por lo que no pudieron plasmar en el campo de juego.
Si nos enfocamos en el clásico que se jugó el domingo pasado en la Bombonera, nos encontramos con un ejemplo que claramente grafica esta situación. San Lorenzo no perdió en la Boca por los horrores del juez Gabriel Favale, sino por (des)méritos propios. El Ciclón se fue derrotado de la casa de su hijo mayor porque su proyecto de técnico, Sebastián Méndez, planteó de movida un esquema extremadamente mezquino. Un 4-4-2 escasamente agresivo, que recién después de regalar los primeros 45 minutos, y con el equipo en desventaja, comprendió que si los delanteros están en Usuahia y el resto de los jugadores en la Quiaca, es imposible que haya conexión entre ellos y, por ende, muy difícil que puedan hilvanar alguna situación de peligro, como ocurrió precisamente siete días atrás. Dio la sensación de que ni Méndez, ni el Nano Areán y mucho menos Patricio Camps, recordaron que San Lorenzo es el padre centenario de Boquita, que toda la vida le causó muchos dolores de cabeza a los xeneizes y que es el equipo que más veces se fue con una sonrisa de la Bombonera, dato este último que no es para nada menor.
Al menos el DT azulgrana hizo mea culpa y tuvo el decoro de no caer en esa flaqueza de responsabilizar al árbitro por la derrota de su equipo, y fiel a su comportamiento como el futbolista que dejó de ser hace apenas unos meses, manifestó que él “nunca habló de los árbitros como jugador y menos lo hará ahora en esta función”. Eso se llama masticar la bronca para adentro, algo que también hicieron la mayoría de los players cuervos que a pesar de alguna protesta aislada, no le cayeron tan duro a Favale como, quizás, lo hubiera merecido.
Sin embargo los hinchas del Ciclón sí tenemos suficientes motivos para parar la pelota, meter un cambio de frente y hablar de un nuevo partido contra los xeneizes, que se vio salpicado por una injusticia arbitral, para decirlo de una manera suave, hacia San Lorenzo. Y van…
Antes de continuar con el robo, perdón, con el partido del último domingo, queremos dejar en claro que ésta no es una historia desconocida para los sanlorencistas. Es más, si recurrimos al archivo de esta revista y ojeamos la edición 188 del 23 de mayo de 2009, nos encontramos con una nota publicada por Jorge Fuentes que se titula “Una historia repetida”. En esas páginas se detallaron diez partidos (había más pero no daba el espacio) en los que San Lorenzo fue perjudicado groseramente jugando frente a Boca. Es más, ese informe había surgido a raíz de un escandaloso penal (ver foto) que días antes, no le concedieran a San Lorenzo luego de que el defensor xeneize, Forlín, desviara la pelota con un grotesco puñetazo que hasta habría sido apreciado por Joseph Blatter desde la sede de la FIFA, en Zurich. Pero sospechosamente, el único que no había visto ese manotazo de vóley había sido Federico Beligoy, el árbitro de aquella tarde. “Era penal y expulsión. Fue siga, siga…”, se cerraba aquel informe publicado el año pasado por esta revista.
Vaya casualidad, casi un año después Boca volvió a ser beneficiado. O quizás quede mejor decir que San Lorenzo volvió a ser perjudicado por un nuevo horror arbitral. Hubo algunos cambios, claro. Esta vez el juez no fue Federico Beligoy sino Gabriel Favale. El protagonista del la acción no fue el pibe Forlín sino el chileno Gary Medel. Y el escenario fue la Bombonera y no el Pedro Bidegain. Lo cierto es que a pesar de estas diferencias, hubo un hecho que fue prácticamente similar al ocurrido el 10 de mayo del año pasado. Cabezazo con destino de gol del Ciclón, el jugador de Boca para la pelota en la línea del arco con su mano derecha y Favale, que en el primer tiempo ya había ignorado un grosero agarrón de Muñoz a Palomino dentro del área, decidió ignorar. Era penal y expulsión. Pero volvió a ser “siga, siga”. Ah, hubo otras diferencias a lo ocurrido en 2009. Esta vez, además de que el penalazo de Gary Medel lo vieran Joseph desde Zurich, los 5000 cuervos desde la tercera bandeja visitante y, entre otros, Federico Beligoy desde el televisor de su casa, también lo pudieron apreciar los miles de turistas que estaban en la Bombonera. En síntesis, la vio todo el mundo menos Gabriel Favale, que fue sancionado por su pobre actuación y esta fecha no dirigirá. Ah, tampoco lo observaron Marcelo Araujo ni Julio Ricardo en la transmisión de TV, a pesar de que la imagen era más que elocuente. “La pelota busca al jugador”, coincidieron en el aire de Fútbol para todos…los de Boca.
Para terminar queremos decir que es verdad, los de San Lorenzo somos unos verdaderos llorones tal cual lo definiría esa imaginario Diccionario del Fútbol del que hablábamos al inicio de esta nota. Pero dándole un poquito más a la imaginación, la curiosidad nos hizo retroceder unas cuantas páginas, hasta la zona de la letra A y nos encontramos con la palabra Afano. Y curiosamente su definición decía así: “Lo que le suelen hacer a San Lorenzo cada vez que se enfrenta a Boca”.

Cuervos de Ley (pág. 10 y 11)

Por Gastón García
Y un día, apareció “Itaqui y el Ciclón”

Dos meses después de publicada la nota que se refería a la frase que titula a esta página, aparecieron los cuervos de Itaqui y nos llenaron la casilla de comentarios, agradeciendo y explicándonos de qué se trata esa leyenda. Nuestro blogspot (larevistadelciclon@blogspot.com) fue el canal que permitió que los protagonistas de esta linda historia pudieran enterarse de que La Revista del Ciclón había hablado de ellos. Gracias por sus mensajes, cuervos de Itaqui.

En la edición número 202 de La Revista del Ciclón, publicamos una nota que hacía referencia a la frase “Itaqui y el Ciclón”. En aquella ocasión, contábamos que esa leyenda, escrita por algún cuervo que desconocemos, la podíamos ver en un montón de baños de estaciones de servicio y que, de tanto leerla, se nos había insertado en la mente hasta convencernos de que Itaqui y el Ciclón era como hablar de la misma cosa. Para refrescar la memoria y recordar mejor de qué hablábamos en esa oportunidad, extrajimos una parte de esa nota: “Honestamente no tengo idea qué es o quién es Itaqui. No sé si es un nombre, un apodo, un hombre, una mujer, un barrio… Vaya uno a saber de qué se trata. Por eso, a vos Itaqui, o a vos autor e la frase “Itaqui y el Ciclón”, si alguna vez te cruzás con esta revista y con esta nota, te quiero decir algo: ¡lo lograste! Me convenciste de que Itaqui es sinónimo de San Lorenzo”.
Ahora bien, usted se preguntará por qué volvemos otra vez con esta cuestión de “Itaqui y el Ciclón”. El tema es así. Después de que esa nota saliera publicada, fueron varios los cuervos que nos comentaron que también alguna vez habían visto en algún lugar la famosa, al menos para la comunidad azulgrana, frase. Es más, algunos hasta nos informaron que Itaqui es una calle y que había una gran banda cuerva que paraba en ese lugar.
Sin embargo, lo que no pudimos lograr era que alguien directamente vinculado con “Itaqui y el Ciclón” se comunique con nosotros para aclararnos un poco la cuestión. Hasta nos había quedado la espina clavada por saber si Itaqui o alguien que represente a eso que no sabíamos bien qué era, habrían leído nuestra nota. En fin, pasó el tiempo y nos resignamos a quedarnos con la intriga.
Pero la sorpresa, grata, nos la llevamos cuando días atrás, específicamente el 25 de abril, nos llegó un comentario al blog de la revista, mechado sobre la nota “Itaqui y el Ciclón”, de Maki de Boedo. Y para que la sorpresa sea aún mayor, después de ese primer mensaje de Maki de Boedo, un montón de cuervos más nos contaron sus historias y sus anécdotas vividas con la gente de “Itaqui y el Ciclón”.
Por suerte, el blog de la revista permitió que, al menos dos meses después de publicada la nota, la gente de Itaqui, a quien fue dirigida, pudieran leerla. Un montón de cuervos de Itaqui nos hicieron saber su alegría y agradecimiento por nuestro reconocimiento hacia ellos. Y nosotros les retribuimos sus saludos, publicando algunos de sus mensajes en esta edición, para que todo el mundo azulgrana entienda definitivamente que Itaqui es del Ciclón.

25 de abril. 14:27 hs. Hola, soy Maki de Boedo. Cuando San Lorenzo salió campeón, por medio de una amiga salíamos de Itaqui. Les juro que era una fiesta. Comíamos asado, colgaban banderas en toda la cuadra de Itaqui. También había bombos y después todos juntos a la cancha. Era buenísimo la movida. Así que por medio de la revista les quiero mandar saludos a todo Itaqui y siempre habrá recuerdos que uno nunca olvidará.

25 de abril. 15:42 hs. Soy Araceli de Mendoza. La verdad que está excelente la nota. Obviamente imposible olvidar el famoso Itaqui. Y mucho menos al creador y responsable de la frase "Itaqui y el Ciclon" se deje leer en cualquier lado. Al Ciclón se lo lleva en el corazón igual que a Itaqui. Aguante San Lorenzo. Saludos.

25 de abril. 15:47 hs. Soy Susana. Viví mucho tiempo en Buenos Aires y tengo muy grabado en mi mente y en mi corazón a “Itaqui y el Ciclón”. Inolvidables eran aquellas fiestas, con la murga. Inolvidables las banderas, los paraguas con esa frase. Aguante el Ciclón, Besos.

26 de abril. 13:16 hs. La nota es espectacular. Quisiera conseguir la revista, amigos. Les estamos muy agradecidos. La gente de Itaqui, la que aguanta siempre.

27 de abril, 09:53 hs. Hola soy Hernán de Mendoza. Un cuervo de cuna y de corazón. Y le agradezco a mi viejo por hacerme de San Lorenzo. Algún día voy a visitar Boedo y al famoso y gran "Itaqui y el Ciclón". ¿Qué será?, siempre me pregunté. Desde acá todo el apoyo a la revista y a San Lorenzo. Como siempre, en la buenas y en malas mucho más. Les cuento que acá en mi barrio hay una pared escrita con la frase “Itaqui y el Ciclón”. Me vuelvo a preguntar ¿qué será? Chau, saludos.

27 de abril, 14:27 hs. Quién no fue a mear (dixit) alguna vez y no leyó la frase “Itaqui y el Ciclón”. Es de otro planeta... Es más, no sólo en baños sino también en garajes, portones, paredes, etc. Pero tengan cuidado que Itaqui no perdona ningún baño. Quizás mañana te levantes a mear bien tempranito y encuentres en el espejo de tu baño la frase "ITAQUI Y EL CICLON". Un grande realmente. Un abrazo, hermanos cuervos.

27 de abril, 21:49 hs. Hola soy Flor. Desde que soy chiquita tengo esa frase grabada: “ITAQUI Y EL CICLON”. Remeras y gorros con esa leyenda. Muy buena la nota y felicitaciones al que hace notar en todos lados que Itaqui es del Ciclón. Besos y Aguante San Lorenzo. Y, obviamente, la gente de Itaqui.