El Toscano Rendo, ídolo cuervo que también vistió la camiseta de Huracán, habló de todo con La Revista del Ciclón: el Gasómetro, la posibilidad de volver a Boedo, su actual función en el Club y el clásico. Un grato mano a mano para disfrutar antes del choque con los Quemeros.
por Daniel De Bonis
Una mañana de martes especial en la Ciudad Deportiva. Por la puerta de acceso se ve ingresar de a uno a los autos con los jugadores que ya no escuc
harán más las órdenes de Ramón Ángel Díaz. Móviles televisivos por doquier y casi toda la dirigencia cuerva presente. A lo lejos, se puede apreciar a un señor petisito y vestido con ropa de entrenamiento que viene a nuestro encuentro. Es nada más ni nada menos que una de las máximas glorias del Club: Alberto Rendo, el Toscano, que hace un alto en su nueva función como ayudante de los técnicos de inferiores y nos da una entrevista en exclusiva en la cual hablará de todo un poco. Mientras esperás que comience el clásico, disfrutala.¿Estuvo presente en la marcha a la Legislatura, Alberto?
Ahí estuve. Había mucha gente, fue espectacular. Se vio a los hinchas muy esperanzados con esta posibilidad de volver a Boedo. Yo recuerdo la cancha, el estadio, cuando la gente bajaba por Avenida La Plata. Era un mundo de gente y tenía una ubicación bárbara. En realidad lo tenía todo y que hoy exista la posibilidad de volver es hermoso. Esperemos que se cumpla con eso.
¿Leyó el Proyecto de Ley?
No, pero estoy al tanto de cómo viene la cuestión y supongo que hoy es algo que se puede dar.
Si alguien le pregunta si es posible la vuelta, ¿qué le responde?
Que se puede dar, por supuesto. Está la posibilidad y por eso la gente ha hecho esa movilización impresionante. Sería algo fabuloso para San Lorenzo tener esta Ciudad Deportiva y además la cancha en Boedo.
¿Cuál cree que sería el mayor beneficio para el Club?
Regresar a ese lugar donde estuvo toda la vida, ¿te das cuenta lo que sería? Donde hay tantas historias de jugadores, de equipos, porque el Viejo Gasómetro es todo una historia en realidad.
Cuénteme una anécdota que haya vivido en aquel estadio…
Mirá, lo que recuerdo siempre es cuando salimos campeones invictos, en 1968, que vinimos de la cancha de River y dimos una vuelta olímpica en el Gasómetro. Fue algo maravilloso. Fue una alegría enorme para todos, algo inolvidable. Como las que lograron los campeones del ‘46 y del ’59.
¿Qué sintió el 2 de diciembre de 1979?
(Piensa) Lo que te puedo decir es que yo pasé un día con el auto, me metí al estadio que ya estaba casi todo levantado, me paré sobre un córner y por acá me pasó una congoja tremenda.
Mientras recuerda, el Toscano se pasa su mano por la garganta, baja la vista y hace un silencio que lo dice todo.
Hablemos un poco de su actualidad. ¿Cuál es su función en el Club?
Soy colaborador en todas las divisiones inferiores. Ahora, por la situación de la renuncia de Ramón Díaz, estoy con el equipo de Miguel Ángel Tojo dando una mano con la primera.
¿Cómo tomó la renuncia de Ramón?
Prefiero no quiero hablar de ese tema, creo que estoy en otra función y no me corresponde hacerlo. Además, no sé bien cómo se dieron las cosas. Es algo que yo no manejo.
¿Cómo ve la actualidad del Club?
Yo lo veo bien. hay que tener un poco de paciencia. Nosotros estamos trabajando junto a un grupo de profesionales con el fútbol amateur. Me encantaría que las cosas se den rápido, que pronto podamos decirle a la directiva o al técnico del primer equipo “acá tenemos cinco jugadores que pueden sumarse al plantel”. Es el tema en el que estamos abocados hoy.
Ahí se va el Toscano Rendo. Contento, con su nueva función en el Club donde alguna vez supo escribir una linda historia.
El clásico
Siempre dije que lo mío fue un caso especial con éste clásico. Lo he jugado varias veces, con ambas camisetas y nunca tuve problemas con la gente, ni de San Lorenzo ni de Huracán. Es una cosa rara pero yo le fui sincero a los hinchas desde el momento que pisé el club por primera vez. Nunca negué que era hincha de Huracán pero como buen profesional siempre defendí los colores de San Lorenzo con todo. La gente siempre me lo supo reconocer y el de Huracán, el viejo socio, también. Odio todo esto que está pasando de la violencia y no lo acepto. Es una pena que pase pero la realidad es que estamos viviendo en un país que desgraciadamente se volvió violento. Esperemos que sea en paz
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